La medida, que aún debe pasar por otras instancias legislativas para convertirse en ley definitiva, permitirá que las escuelas utilicen la Biblia como herramienta de apoyo en actividades pedagógicas, siempre en el marco del respeto a la libertad religiosa y sin carácter obligatorio.
El proyecto destaca que la Biblia podrá ser empleada en materias como literatura, historia, filosofía, formación ética y ciudadana, con el fin de enriquecer el conocimiento cultural y moral de los estudiantes. Según los legisladores que impulsaron la propuesta, se busca valorar el legado judeocristiano en la formación de la identidad brasileña y fomentar principios de respeto, justicia y paz.
La aprobación ha sido celebrada por diversas entidades cristianas, pastores y líderes educativos, quienes consideran que este paso representa un avance en la recuperación de los valores éticos y espirituales en la educación. Sin embargo, también ha recibido críticas de algunos sectores que argumentan que podría abrir la puerta a conflictos sobre el carácter laico del Estado.
A pesar de las diferencias, la medida no impone el estudio de la Biblia, sino que lo propone como un recurso disponible para enriquecer los contenidos escolares, dependiendo del contexto y criterio pedagógico de cada institución.
🙏 Reflexión cristiana para El Evangelista Digital:
La aprobación de este proyecto en Brasil es una respuesta a años de oración y trabajo por parte de quienes creen que la Palabra de Dios tiene un valor formativo más allá del culto religioso. Como dice 2 Timoteo 3:16, “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir y para instruir en justicia.”
Que la Biblia sea reconocida como fuente educativa es motivo de gozo, pero también un llamado a interceder para que sea usada con sabiduría, respeto y fidelidad a su mensaje. Oramos para que esta iniciativa inspire a otras naciones a abrir las puertas de sus aulas a la luz transformadora del Evangelio.