Los rebeldes hutíes con base en Yemen calificaron el lanzamiento del dron como "una operación militar de alta calidad", y un portavoz publicó en X: "Pronto revelaremos los detalles de una operación especial que tuvo como objetivo Tel Aviv".
El ataque tuvo lugar cerca del Consulado de Estados Unidos, que antiguamente albergaba la Embajada de ese país en Tel Aviv.
Una investigación preliminar de las Fuerzas de Defensa de Israel resultó en una declaración que señalaba que la explosión "fue causada por la caída de un objetivo aéreo, lo que no activó una advertencia".
Associated Press informa que este fue el primer avión no tripulado lanzado por los hutíes hacia Israel que no fue interceptado por Israel o sus aliados occidentales.
Un informe de la publicación proiraní Al-Mayadeen afirmó: “Un gran dron penetró en el espacio aéreo de Palestina ocupado a baja altitud desde el mar y explotó en la ciudad de Tel Aviv, causando importantes daños a edificios y numerosos heridos”.
El analista militar de Oriente Medio Seth Frantzman escribió en una columna para The Jerusalem Post: "Esto representa una amenaza significativa para Israel y dará a los aliados iraníes en la región una razón para sentir que han logrado un nuevo éxito en sus esfuerzos bélicos. Aviv es un objetivo principal y simbólico".
Frantzman añadió: "Los enemigos de Israel han tenido como blanco a Tel Aviv desde la Guerra de la Independencia de 1948. Saddam Hussein también atacó Tel Aviv con misiles Scud en 1991".