Taylor Swift canceló abruptamente tres conciertos en Viena esta semana, citando preocupaciones de seguridad después de que las autoridades detuvieran a dos sospechosos vinculados a un supuesto complot terrorista contra el lugar. Ambos detenidos son adolescentes y ciudadanos austríacos. Según la policía, uno de ellos había jurado recientemente lealtad al grupo terrorista ISIS tras haberse radicalizado en Internet.
El agente especial del FBI, Richard Frankel, declaró a ABC News: "ISIS sigue activo. Continúan en línea y siguen reclutando".
Durante un operativo en la residencia de uno de los sospechosos, se encontró lo que parecía ser material para fabricar bombas. Uno de los detenidos confesó haber planeado "matar al mayor número posible de personas en las afueras del lugar del concierto".
"El atentado terrorista planeado en Viena representaba una amenaza muy seria", señaló el canciller austriaco Karl Nehammer en un comunicado. "La amenaza fue detectada a tiempo, neutralizada y se evitó una tragedia".
Aunque ISIS no ha reclamado la autoría del complot, el grupo ha sido responsable de ataques en otros conciertos. En marzo, hombres armados mataron a 60 personas en un teatro de Moscú.
A pesar de las cancelaciones en Austria, Swift planea continuar su gira la próxima semana en Inglaterra.
En un incidente separado en Estados Unidos, las autoridades arrestaron a un ciudadano pakistaní con vínculos con Irán por conspirar para asesinar al expresidente Donald Trump y a otros funcionarios públicos. El sospechoso, identificado como Asif Merchant, de 46 años, fue detenido el mes pasado y acusado por el Departamento de Justicia de intento de asesinato por encargo.
Una denuncia penal recientemente revelada indica que Merchant intentó contratar sicarios para asesinar a políticos de ambos partidos, siendo el expresidente Trump el objetivo más destacado.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, declaró: "Estamos acusando a un individuo con vínculos con Irán que, según nuestras afirmaciones, intentó contratar asesinos a sueldo para eliminar a un político en territorio estadounidense".
Los fiscales afirman que Merchant pasó dos semanas en Irán antes de volar a Estados Unidos, donde pagó a personas que creía eran sicarios, pero que en realidad eran agentes encubiertos.
Fox News informó que el Departamento de Justicia siguió a Merchant y le permitió ingresar al país para reunir pruebas antes de su arresto. Fue detenido el 12 de julio, un día antes de que un hombre armado intentara asesinar al expresidente Trump en un mitin en Pensilvania.